La falta de concentración, estrés y ansiedad son algunos de los sentimientos y trastornos que han llegado con este confinamiento, pues nuestras actividades diarias cambiaron por completo, y estar en casa puede tener sus ventajas y desventajas. La concentración está ligada a la motivación. Es la habilidad de canalizar recursos cognitivos en una acción o estímulo, lograr que solo un objeto o actividad tenga nuestra total atención. ¿Qué nos hace perder la concentración? Varios psicólogos han hablado de la falta de concentración, y coinciden en el hecho de que estar pendientes, de manera directa o indirecta, sobre la pandemia, hace que nuestra concentración se quede atrapada ahí. Así que desconectarse un poco de las noticias nos puede favorecer. Entre otros factores, influye lo que tenemos a nuestro alrededor, cosas como los celulares, videojuegos e incluso la comida que está en nuestras cocinas. ¿Cómo concentrarnos durante el confinamiento? Aceptación: Lo primero que debemos hacer, es aceptar la situación que se vive actualmente, y tratar de tener un pensamiento positivo. Para una buena concentración es preciso tener una buena salud mental. Lugar de trabajo: En el caso de tener educación en línea o hacer el homeoffice, es buena idea tener un lugar específico donde realicemos estas labores, de preferencia donde haya buena iluminación, sonido y que nos permita tener una buena postura, además de seguir un horario y cuando sea necesario, tomar un descanso. Ejercicio: Hacer ejercicio físico, de respiración o tonificación, y mantener una buena alimentación también nos ayudan, ya que de esta manera obtenemos energía, y ayuda a que prestemos más atención a ciertas tareas. Tecnologías: Otra buena opción para lograr la concentración, es mantenernos alejados de los aparatos electrónicos cuando no lo necesitemos, tales como televisión, computadora o celular. Tomar un respiro fuera de la realidad virtual es excelente. Actividades variadas: Se motiva también a hacer actividades diferentes a lo largo de la semana, pues a pesar de que tener una rutina establecida ayuda, hacer la misma acción todos los días puede afectarnos. Variar un poco estimula nuestro cerebro y nos ayuda a concentrarnos. Aire fresco: Aunque por el confinamiento se invita a estar en casa, hay momentos en que es necesario salir un poco. Se puede salir a caminar, siguiendo todas las indicaciones señaladas por nuestra seguridad y la de los demás, de esta manera despejamos nuestra mente y posteriormente puede ser de mucha ayuda al momento de concentrarse.