¿Cómo funciona la Terapia del Lenguaje en adultos?
La Terapia del Lenguaje en adultos ayuda a la correcta pronunciación y a el tratamiento de algunas patologías relacionadas con el habla
Es común que al pensar en dificultades para el lenguaje y el habla se nos venga a la mente la imagen de un niño o de nosotros mismos de pequeños cuando se nos dificulta decir algunas palabras o pronunciar algunas sílabas. Sin embargo, aunque solemos relacionar este tipo de patologías y sus terapias con la edad infantil, también se desarrollan en la edad adulta. De hecho, la fonoaudiología es una profesión que aborda los problemas del habla y el lenguaje a lo largo del ciclo vital. ¿Cuánto gana un terapeuta del lenguaje en México?
Existen diferentes razones por las que los adultos asisten y se benefician de este tipo de terapia. En ocasiones, se asiste a las mismas luego de la pérdida repentina del habla por un accidente neurológico que ha afectado gravemente la forma de comunicarse. Pero también profesionales artísticos, figuras públicas, conferencistas y quienes deseen tener un menor manejo de su voz asisten a terapia de fonoaudiología para perfeccionar su voz. De igual manera, quienes deseen adoptar un acento neutro o sufren de miedo escénico y problemas de respiración. La asistencia del terapeuta del lenguaje en temas relacionados con la comunicación es amplia porque el mismo campo de la comunicación es amplia. Este acompañamiento terapéutico va desde el enfoque médico-rehabilitador hasta el enfoque de apoyo escolar y el abordaje psico-social. El lenguaje es una herramienta fundamental en el desarrollo y bienestar del ser humano por esa razón cada vez más los adultos asisten a terapia para recibir ayuda en su comunicación, enunciación, comprensión o cualquier otro déficit o problema que limite el habla. En este post hablaremos sobre la terapia del habla y cómo funciona la terapia del habla para adultos. ¿Qué es la terapia del lenguaje? Se trata de una intervención que tiene como objetivo mejorar o recuperar la capacidad que tiene una persona para expresar, entender o comprender el lenguaje. La responsabilidad de la terapia recae sobre un profesional médico-social también conocido como fonoaudiólogo o logopeda. La terapia del lenguaje o habla se realiza de acuerdo a las necesidades de la persona, por esa razón existen varias maneras de llevar a cabo la intervención que podría ser para tratar problemas para hablar con claridad, manejo de la respiración, dificultades para tragar, dificultades de lecto-escritura o para encadenar palabras y frases. Otras dificultades como la sequedad en la boca, ceceo y tartamudeo, volumen y potencia de la voz, ronquera, dolor de las cuerdas vocales y educación de la voz también son tratados y mejorados con este tipo de terapia. La terapia del habla en adultos se lleva a cabo a través de una evaluación formal para determinar el origen, áreas y alcance del déficit y a partir del diagnóstico se desarrolla un plan de intervención con objetivos. La terapia abarca aspectos de voz, articulación, fluidez y lenguaje receptivo/expresivo. Por lo general, la asistencia a un terapeuta del lenguaje se desencadena como recomendación de un médico neurólogo, otorrinolaringólogo, odontólogo). Pero también puede activarse luego de la recomendación o consejo de neuropsicólogos, maestros de educación especial o fisioterapeutas. Las familias son un insustituible apoyo durante el proceso terapéutico ya que las dificultades del lenguaje en los adultos también afectan aspectos como las emociones y la autopercepción y vienen acompañados con riesgos de depresión, ansiedad y baja autoestima debido en ocasiones a la incapacidad que acompaña a estas dificultades y a la gravedad de las mismas. Por esa razón, las terapias de lenguaje con frecuencia se realizan en conjunto con otro tipo de intervenciones y terapias por lo que el especialista ha de trabajar de forma coordinada y en equipo con otros profesionales médicos y sociales. Cómo funciona la terapia del habla en adultos Los adultos que asisten a terapia de lenguaje no siempre lo hacen por patologías hereditarias o adquiridas desde el nacimiento. De hecho, con frecuencia se debe a situaciones desencadenadas en la adultez que han afectado el modo de comunicarse. Enfermedades como el cáncer oral o de laringe, cirugías de tráquea o cuerdas vocales, demencias, daño cerebral, parálisis facial, condiciones respiratorias, autismo, envejecimiento o necesidades profesionales de perfeccionar la voz pueden ser algunas de las razones. Las terapias del habla funcionan de acuerdo a los objetivos y necesidades del paciente. Con frecuencia se incluyen en el tratamiento las siguientes: En el primer contacto es conveniente que el especialista tenga acceso a expedientes, exámenes y expedientes médicos previos que le permitan una orientación basada en la evidencia. Se establecerá un primer contacto con el paciente para determinar sus necesidades y dificultades, se realizarán pruebas adicionales y se concluirá un diagnóstico. A partir del diagnóstico el especialista establecerá el tipo de intervención más adecuada, el tiempo de sesión, la frecuencia y los ejercicios o apoyos adicionales. A lo largo de las terapias el especialista realizará evaluaciones para determinar la evolución del paciente y ajustar el tratamiento y los objetivos en función de la evolución. Las terapias más comunes incluyen una fijación de objetivos o destinos que es concentrarse en el aspecto que genera la dificultad. por ejemplo, problemas con la pronunciación de ciertas sílabas o palabras para concentrarse en las mismas y aplicar terapias de repetición y corrección. La utilización contextual es la separación de palabras en sílabas con la finalidad de reconocer donde ocurre la dificultad y centrarse en las mismas. Es una intervención común en el tratamiento de la tartamudez. También para el aprendizaje del lenguaje ante un deterioro o accidente cerebral que haya afectado el sistema del lenguaje. En la terapia del lenguaje el terapeuta realiza ejercicio para contrastar palabras similares o diferentes y ejemplificar esas similitudes o diferencias. Sirven para ayudar a pacientes con problemas de comprensión lectora o de escritura. Por último, la terapia oral-motora trabaja en el fortalecimiento o reemplazo de los músculos de la cara ante cirugías, accidentes o parálisis que haya afectado la función normal de los músculos, órganos o huesos de la cara. Conoce nuestra Maestría en Terapia del Lenguaje aquí