10 de septiembre de 2021, Alex
Dislexia, conocimiento e intervención
Se calcula que un 10% de los alumnos tienen dislexia. Aun así, la cifra subiría peligrosamente si se detectase con mayor acierto, ya que la inmensa mayoría de casos pasan por alumnos vagos, despistados y desmotivados.
Dislexia y fracaso escolar Desafortunadamente, muchos de los alumnos con dislexia no reciben la intervención psicopedagógica ni logopédica necesaria para rehabilitar sus dificultades y seguir avanzando en su aprendizaje motivados y con buena autoestima. Muchos de ellos pasan desapercibidos, por lo que se les evalúa igual que al resto de sus compañeros y no reciben la intervención basada en sus necesidades educativas. Estos alumnos tienen bajo autoconcepto, piensan que no valen para estudiar, muchos abandonan sus estudios o terminan la enseñanza básica y dejan de estudiar. En este punto, es vital tomar conciencia y formarse en el conocimiento la dislexia. Los psicopedagogos y los logopedas que trabajamos con alumnos tenemos que saber detectar la dislexia, qué pruebas estandarizadas se utilizan y cómo hacer una intervención educativa acorde a las necesidades del alumnos. De la misma manera, el profesorado tiene que recibir la formación necesaria para saber identificar los indicadores de la dislexia y saber derivar al psicopedagogo o al logopeda. Es importante explicar a la familia qué es la dislexia de su hijo y saber trasmitirles tranquilidad y esperanza, ya que, un alumno con dislexia es capaz de seguir el mismo proceso de aprendizaje que el resto de sus compañeros, terminar los estudios con un buen perfil profesional y tener buena autoestima y motivación. Eso sí, siempre que se respete su diversidad, se adecuen las pautas educativas necesarias y reciba el apoyo escolar, psicopedagógico y familiar.